El lunes no es un buen día...

- El fin de semana, divertidísimo, se convierte en una carga física y emocional, estás cansado de la chinga que te pusiste (llámese peda, viaje o eso de andar de cogiloco), pero por otro lado quisieras que así fueran todos los días (o sea, como los días del fin de semana, pues)... pinches lunes...

- Es cuando más trabajo hay... no hay derecho, mano...

- Todo pareciera indicar que amanece más temprano... (pérame... ese fue el cambio de horario... ¿fue para delante o para atrás?... ya ni sé...)

- Reaparecen todas la molestias físicas que durante el fin de semana te valieron madre.

- No sé a los demás, a mí me da tal dolor de riñones por dormir tanto el fin de semana...

- Los lunes son laaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaargos.

- La cuenta de espermatocrito comienza a aumentar de nuevo de manera paulatina, lo que es cansado. La producción de espermatozoides consume mucha energía. O por lo menos eso parece.

- Falta muuuuuuuuucho para el otro fin de semana.

- Pero ultimadamente, a mí, en particular, me vale literalmente madres, por que ¡Estoy de vacaciones! y en este preciso instante estoy tirado de panza en mi cama, de ocioso... ¡TENGAN, PERROS!...